Pecata minuta

Me pide Joan que haga un meme sobre los pecados capitales. Entiendo que debo confesar alguna situación en la que caigo en ellos. Ahí va:

IRA

Creo que no es mi punto flaco, soy bastante paciente y me cuesta enfadarme. Sin embargo, puede decirse que soy un airado de 'pluja fina': no es que sea rencoroso, pero los pequeños detalles, en vez de borrarse, se me acumulan en la montaña con la etiqueta de 'hartazgo' hasta que rebosan los límites. Lo cual me perjudica para mantener relaciones de cualquier índole. Por eso ahora intento racionalizar más.

LUJURIA

¿Quién no se da una vuelta, antes de ir a dormir, por páginas llenas de pelanduscas en posturas acrobáticas, y más si son del sudeste asiático, eh? ¿Quién? ¿Quién? ¿Quién, eh? Bueno, cabrones, pues yo sí.

GULA

Hasta no hace mucho, mi dieta con base de kebabs y pizzas Tarradellas -y bocatas de atún a final de mes, cuando ya no había dinero- bastaba para satisfacerme. La suerte y la lujuria quisieron que mi destino se mezclara con otros menos acomodaticios si de comer se habla, y el morro se me ha puesto más fino. Ahora me conocen el jeto en lugares de nivel, como la taberna El Disbarat, y siempre como dos platos. En consecuencia, peso casi el doble.

ENVIDIA

Pues, mal que me pese, cada vez envidio más la vida acomodada, los momentos de asueto que no puedo permitirme, y tener el dinero suficiente para poder vivir sin preocuparme de qué comeré el mes que viene. También me despierta esa sensación sucia la lectura de algunos libros, como La conjura de los necios, que me recuerdan que es puro milagro que no naciera chimpancé.

AVARICIA

Aquí sí que creo que no tengo mácula, porque cobre lo que cobre llego al mes con la lengua fuera.

SOBERBIA

Me fijo demasiado en las faltas de ortografía, quizás porque no suelo tener muchas, y si descubro alguna me siento automáticamente superior al zote en cuestión. Últimamente estoy entendiendo que grandes genios las tienen y las tenían, pero aún se me escapa la risa de Nelson el de los Simpsons cada vez que veo un "haber que pasa" o un "cogistes".

PEREZA

Mirad si es obvia, en cualquier situación, que voy a acabar aquí de escribir.



Bueno, pues nombro a Sadbuttrue, Maik y Félix, a los que habré de informar previamente de la existencia de este blog.

Ocio Forzado

He aquí este blog, inspirado en principio por el genial castigo al que sometieron los Medici a Maquiavelo cuando volvieron a Florencia en 1512: el ocio forzado. El hombre había tenido responsabilidades políticas en la República inmediatamente anterior, y a los nuevos gerifaltes no se les pasó por la cabeza cortarlo a trocitos, someterlo a tortura o mandarlo desterrado a Marina d'Or, ciudad de vacaciones. Los Medici decidieron condenarlo al "ocio forzado", lugar etéreo donde Maquiavelo tuvo tiempo de escribir toda su obra.
¿Imagináis lo que pasaría si algún Gobierno retomara esa forma de castigar los crímenes? Yo sí: no quedaría un banco abierto ni una menor por sodomizar. Es como si delinquir saliera gratis, no, es como si además te pagaran.